De la pantalla al libro: cómo ayudar a los niños a enamorarse de la lectura?

Si eres padre o madre y quieres educar a un pequeño amante de los libros, es posible que te hayas encontrado tratando de hacer que los ojos de tu hijo abandonen la pantalla para caer en las páginas de un buen libro. No te preocupes, en Elis Elis nos encanta perdernos durante horas en las páginas de un buen libro y estamos aquí para compartir algunos consejos sobre cómo hacer de la lectura una actividad divertida y emocionante para tus hijos. Desde crear un rincón de lectura acogedor hasta dar ejemplo con tus propios hábitos de lectura, explicamos algunas maneras de convertir a tu hijo en un amante de los libros.

1. Empieza temprano

Cuanto antes comiences a leer a tus hijos, mejor. Incluso te recomendamos comenzar antes de que tu hijo pueda entender las palabras, ya que puede beneficiarse de escuchar el ritmo y el tono de tu voz. Leer a tus hijos también puede ser una gran manera de vincularte con ellos y crear una asociación positiva con los libros.

2. Hazlo divertido

La lectura debería ser agradable, no una tarea. Escoge libros que sean apropiados para la edad y que tus hijos encuentren atractivos. También puedes experimentar añadiendo voces cómicas o representando la historia para hacerla más dinámica y entretenida.

3. Da ejemplo

Los niños a menudo aprenden siguiendo ejemplos y referentes que les rodean, así que si quieres que tus hijos sean amantes de los libros, tú también tienes que serlo. Dedica tiempo a leer en tu propia vida y deja que tus hijos te vean hacerlo. Esto les mostrará que leer es una actividad valiosa y divertida.

4. Hazlo accesible

Asegúrate de que tus hijos tengan fácil acceso a los libros. Puedes llevarlos a la biblioteca o a la librería y dejar que elijan sus propios libros. También puedes crear un rincón de lectura acogedor en tu casa donde puedan leer tranquilamente.

5. Limita el tiempo de pantalla

En la era digital actual, es fácil que los niños (¡y los no tan niños!) pasen todo su tiempo libre frente a las pantallas. Aunque la tecnología también puede ser beneficiosa en muchos aspectos, es importante limitar el tiempo de pantalla y animar a tus hijos a pasar tiempo con otras actividades, como un buen libro o tiempo al aire libre jugando y haciendo volar la imaginación.

6. Hazlo un hábito

La constancia es clave para desarrollar cualquier hábito, incluyendo la lectura. Intenta hacer de la lectura una parte de la rutina diaria de tus hijos. Puedes establecer un horario diario para leer o animarlos a que lean antes de dormir.

En conclusión, la lectura es una habilidad valiosa que puede beneficiar a los niños de muchas maneras. Comenzando temprano, haciéndolo divertido, dando ejemplo, haciéndolo accesible, limitando el tiempo frente a la pantalla y convirtiéndolo en un hábito, los padres pueden ayudar a inculcar en los más pequeños un amor por la lectura que durará toda la vida. ¡Viva la lectura!